Capacidad de mirar al niño/a en relación a ¿Cómo reacciona?, ¿Cómo es su expresión facial? y ¿Qué comunica?, ¿Cómo se pone cuando se enoja?, ¿Cuándo está triste?, ¿Cuándo está angustiado?. También implica conocer el temperamento del niño/a para poder anticipar ¿Cómo va a reaccionar ante ciertas situaciones y personas?. De este modo el adulto aprende que no todos los niños/as son iguales y el niño/a se siente respetado y validado.
Una vez que se ha prestado atención al niño/a y sus reacciones, el paso siguiente es adentrarse en su mundo interno. Preguntarse ¿Qué puede estar sintiendo el niño o qué quiere expresarnos?. Está demostrado que un adulto con buena capacidad de mentalización es clave en la calidad del vínculo y en la seguridad emocional del niño. No implica hacer lo que el niño/a pide; pero sí no descalificar, no burlarse, no amenazar.
Se refiere a que el adulto intente identificar ¿Qué le sucede a él o ella ante las situaciones de estrés con los niños?: ¿Cuándo llora?, ¿Cuándo no quiere dormirse?, ¿Cuándo no hace caso?. Reconocer lo que nos ocurre permite calmarse y también permite separar lo que el niño/a hace de lo que nosotros sentimos. (¿No será que estoy irritable porque tuve un día duro en el trabajo?).
Las tres capacidades anteriores se consideran una preparación mental antes de aplicar acciones concretas con los niños/as. La regulación se refiere a intentar disminuir los niveles de estrés en el niño/a y – una vez que la tormenta haya pasado - buscar enseñarle ¿Cómo enfrentar mejor esos momentos? a través de habilidades como la empatía, el buen trato, la comprensión de las consecuencias de las propias acciones, etc.
El objetivo primordial de un padre o cuidador es lograr la seguridad emocional del niño/a. Felipe Lecannelier plantea que para ello no existen recetas mágicas ni pasos a seguir, pues cada niño y cada situación es diferente. El camino que propone el psicólogo y su equipo es que el adulto desarrolle un estado mental/emocional compuesto por cuatro capacidades (cuyas iniciales forman la sigla A.M.A.R.) que le permitirán estar en sintonía con el niño/a y mirar con realismo lo que está sucediendo.





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REFERENTES